Venezuela: "Esa semilla que nos dieron era de mala calidad"

En el sector San Antonio de Chirgua, Luis Adolfo Hernández, conocido popularmente como Fito, sembró nueve hectáreas de papa Kennebec. 

Él fue uno de los afectados por el tema de las semillas. Los resultados se están viendo ahora.Tanto las entregadas inicialmente como las repuestas, insistió, presentaron problemas porque pertenecían al mismo lote. 

"Esa semilla que nos dieron era de mala calidad. Yo nací bajo una mata de papas; tengo 53 años y más de 40 sembrando, conozco bien lo que hago", argumentó.Según Fito, la Kennebec ya no está dando buenos resultados, por tanto, cree que el Estado debería intentar traer otra variedad para sustituirla: "Esa papa está degenerada, ya no nos sirve aquí". 

Dice que el único país que le compra ese tipo de papa a Canadá es Venezuela, porque en otras naciones "ya casi nadie la quiere".

Al momento en que visitamos su parcela aun le faltaba por recoger. Sin embargo, calcula tener un rendimiento de 7 u 8 mil kilos por hectárea. "En la cosecha del año pasado agarré 180 mil kilos en total, este año promedio más o menos la mitad", contrastó el productor.Esa situación, acota, lo obligó a reducir la cantidad de personas que contrata durante la zafra y además a recortar la inversión: "Los implementos están demasiado caros, igual que los aceites, todo está más caro, y con esto uno sale con las tablas en la cabeza".

Aunque este año el Gobierno aumentó el precio que paga a los productores por la papa de consumo fresco, de 14 a 28 bs por kilo, Fito considera que ese monto todavía es muy bajo, y que más bien debería equipararse con el que paga la agroindustria, que alcanza los 40 bs. "Si no mejoran yo no puedo seguir trabajando con ellos, y creo que si siguen así como van, se van a quedar sin productores", asintió.Al momento en que visitamos su parcela aun le faltaba por recoger. Sin embargo, calcula tener un rendimiento de 7 u 8 mil kilos por hectárea. "En la cosecha del año pasado agarré 180 mil kilos en total, este año promedio más o menos la mitad", contrastó el productor. 

Refiere que también ha tenido problemas con los insumos: "Agropatria dice que asegura al 100% los insumos, pero uno va para allá y no hay abono. Nos dan 25 sacos para una hectárea, eso no alcanza, y los venenos que tienen son malos, le dan a uno para tres fumigadas cuando lo que se echa son ocho y nueve fumigadas".