España: Los patateros de A Limia retienen un 25% de la cosecha a la espera de una subida en los precios
Los precios de variedades siguen rondando entre los 20 y 25 céntimos por kilo de tubérculo

A principios del año pasado casi tres cuartas partes de la producción limiana de patatas (70 millones de kilos) estaba sin vender en los almacenes de los labradores antelanos por falta de demanda del producto. Hoy las cifras se han invertido. Solo una cuarta parte de la cosecha permanece almacenada y por voluntad de los agricultores, que esperan un repunte al alza del precio del producto. Eso supone menos de 25 millones de kilos los que todavía están sin vender.
La producción global de la temporada 2014-2015 fue más elevada que la del presente ejercicio. A principios de 2015 permanecían en las naves sin comercializar más de 70 millones de kilos, de los 110 recolectados en total. En la actual campaña la cosecha fue más reducida, de 95 millones. La merma vino motivada por el descenso en el número de hectáreas sembradas y por la sequía del verano.
El responsable del Centro de Desenvolvemento Agrario de Xinzo, Servando Álvarez, comentó que este cambio radical ha sido posible por el contraste entre un año como el anterior con precios muy bajos «y un mercado paralizado». Álvarez matizó que esta campaña, sin embargo hay «precios normales, que permiten al agricultor cubrir costes de producción y obtener algo de beneficio y que exista una demanda más ágil y no el colapso del año anterior».
Entre 20 y 25 céntimos
Ahora mismo los precios de variedades siguen rondando entre los 20 y 25 céntimos por kilo de tubérculo, mientras que el año pasado apenas superaron los 5 durante la mayor parte de la campaña.
El otro problema con el que a menudo se encuentran los agricultores, la conservación adecuada en los almacenes tampoco es una dificultad en esta campaña.
«La cosecha fue muy sana, no hubo prácticamente plagas ni podredumbre por las altas temperaturas y la falta de precipitaciones, y eso favorece que el almacenaje haya sido adecuado y sin dificultades», explica el técnico. Y añade: «El hecho de que tampoco esté haciendo mucho frío hasta ahora posibilita que las temperatura en las naves no hayan caído hasta menos de 7 u 8 grados, que es algo que arruina la patata para su fritura».
Las inundaciones no afectarán
Por su parte, los productores están razonablemente satisfechos por los precios obtenidos esta campaña. Alguno de ellos afirmó que espera vender hasta a 30 céntimos el kilo. El tubérculo es un producto que puede aguantar varios meses almacenado correctamente sin temor a la aparición de grumos o podredumbre.
Servando Álvarez mencionó que el actual encharcamiento de fincas por las fuertes precipitaciones de las pasadas jornadas no debería perjudicar a las fincas de cereal ni de tubérculo de cara a la futura cosecha.
El problema sí podría llegar en caso de que las precipitaciones continuaran siendo importantes en los próximos meses, ya que afectarían al cereal de invierno.
En años de inundaciones graves como en 2010, esa importante cantidad de precipitaciones en las cosechas durante el invierno y el principio de la primavera también redujo de forma importante la producción de cereal. Este es, tras la patata, el segundo cultivo más importante de la comarca de A Limia, con una producción de unos 40 millones de kilos anuales.
Fuente: http://www.lavozdegalicia.es/noticia/ourense/2016/01/14/patateros-limia-retienen-25-cosecha-espera-subida-precios/00031452717592274686867.htm