España (Jerez): Preocupación por “abusos brutales” de precios en las fruterías de barrio
Critica que los fruteros “quieran hacer su agosto con la crisis” y recaba datos para hacer una campaña de denuncia sobre los excesos Lamenta la entrada masiva de productos de fuera lastran los precios en origen de patatas y cebollas
Un afiliado de Coag donó hace unos días al centro operativo municipal del Kiko Narváez un palé de cítricos, los últimos que le quedaban en el campo y que prefirió destinar a familias afectadas por la crisis del coranavirus antes que malvenderlos. “Al precio del mercado, los estaba casi regalando y prefirió donarlos”, explica Miguel Pérez, secretario provincial de la organización agraria, en su denuncia de la situación a la que se enfrenta el sector, que sigue arrastrando los mismos problemas que antes de la crisis, en algunos casos incluso agravados por la entrada masiva de alimentos de fuera que hunden los precios, en otros, por la picaresca de pequeños comercios.
El comité regional de Coag abordará hoy los abusos de cadena alimentaria desde una doble vertiente: la ya conocida de los bajos precios en origen que perciben los agricultores por algunos productos, de un lado, y los márgenes “brutales” que están aplicando no ya las grandes superficies, sino muchos comercios de proximidad.
“En algunas tiendas y fruterías pequeñas está habiendo un abuso tremendo, cobrando por ejemplo la calabaza a cerca de tres euros cuando al productor se paga a 30 o 40 céntimos –es decir, diez veces menos que el precio de venta al público–; da la impresión de que estos fruteros quieren hacer el agosto”, recrimina Pérez, quien admite que este es un asunto delicado, pues ni está generalizado ni esta es su batalla, aunque también afecta al bolsillo de los consumidores y daña la imagen de los agricultores.
Coag estudia emprender una serie de campañas de denuncia de estos abusos y de apoyo a las producciones locales con problemas. Al margen de los excesos descritos, preocupan y mucho las entradas masivas de productos “muy baratos” como la patata o la cebolla procedentes de Francia y hasta de Australia, que “están saturando el mercado con precios a la baja”.
La falta de precio y también de mercado afecta principalmente a las hortícolas, caso del puerro, que en el supermercado más barato cotiza a 2,60, cuando hay productores que han tenido que dejarlo en el campo porque no le pagan ni 30 céntimos, asegura Miguel Pérez. El responsable agrario puntualiza, no obstante, que a diferencia de las tiendas de de barrio, “las grandes superficies están trabajando con márgenes normales, con precios de venta al público que son altos, pero que se han movido poco y están dentro de lo que puede considerarse normal”.
La solución a muchos de estos problemas está en la reforma de la ley de calidad alimentaria, en periodo de alegaciones y que también abordará hoy Coag. “Lo más interesante de esta norma es que prohíbe la venta a pérdidas y tiene que haber un contrato entre el comprador y el vendedor, por lo que el productor tendría gastos cubiertos”, indica Pérez. La organización agraria confía en que, una vez se fijen los costes de producción, sea el Estado el que marque los precios de referencia, porque “como se deje en manos de vendedores y compradores estaríamos en las mismas”.
Fuente: diariodejerez.es
