Uruguay: El INIA impulsa la multiplicación de semilla de papa de calidad para la agricultura familiar

En los últimos años, el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA) ha desarrollado cultivares de papa resistentes a virus como el PVY y a enfermedades como Phytophthora infestans y Alternaria solani, lo que facilita la multiplicación local de semillas. Sin embargo, el suministro de semillas de calidad sigue siendo un obstáculo crítico, especialmente para las explotaciones pequeñas y no especializadas.

Estos agricultores a menudo enfrentan dificultades con el costo de las semillas, la disponibilidad limitada y la necesidad de renovarlas con frecuencia debido a la degeneración y la propagación de enfermedades, problemas que se agravan con el uso de variedades genéticamente uniformes propagadas por clones. Como resultado, los productores a menudo se ven limitados a comprar semillas costosas de fuentes externas, que no siempre están adaptadas a los climas locales ni son resistentes a las plagas y enfermedades prevalentes en Uruguay.

Una de las delegadas patrocinadas para asistir al Congreso Mundial de la Papa en Adelaida, Australia, fue la Dra. Paula Colnago, agrónoma del Centro Experimental Regional Sur de la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República, Uruguay. Para abordar algunos de estos desafíos, está investigando el desarrollo de sistemas alternativos de multiplicación de semillas que sean más accesibles para las pequeñas explotaciones familiares.

La investigación de Colnago se centra en mejorar la multiplicación de semillas de papa mediante técnicas y materiales alternativos. Entre los métodos investigados se encuentran la hidroponía semiautotrófica (SAH) y la semilla verdadera de papa (SPT), que no solo son respetuosas con el medio ambiente, sino que también ofrecen ventajas considerables sobre los métodos tradicionales de propagación clonal.

El sistema SAH utiliza tejido micropropagado para producir plántulas para diferentes sistemas de minitubérculos, como la aeroponía. Este método se ha implementado con éxito en diversas partes del mundo, pero se probó recientemente en Uruguay como parte de esta investigación. Además, el TPS ofrece un alto nivel de diversidad genética, lo que ayuda a reducir la propagación de enfermedades y el impacto ambiental del cultivo de papa. El TPS es rentable, fácil de almacenar y transportar, y permite una siembra más temprana.

Entre 2022 y 2024, el equipo de Colnago realizó una serie de ensayos diseñados para evaluar el potencial de producción de tubérculos-semilla utilizando dos materiales genéticos: INIA Arequita, una variedad desarrollada localmente, y progenies de TPS, en diversas condiciones de siembra.

La colaboración entre investigadores y agricultores locales ha sido fundamental para asegurar el éxito de este proyecto.

La Red Uruguaya de Agroecología, una organización de agricultores, desempeñó un papel activo en la investigación, participando en ensayos en fincas y ayudando a evaluar la efectividad de diferentes técnicas de multiplicación. Se designó a los agricultores para gestionar los ensayos en sus propias fincas, registrando los resultados y participando en la toma de decisiones a lo largo del proyecto. Esta experiencia práctica empodera a los agricultores para que se apropien del proceso de multiplicación de semillas.

La participación de Colnago en el Congreso Mundial de la Papa (WPC), celebrado en Adelaida, Australia, le brindó la oportunidad de compartir esta investigación y fortalecer su desarrollo profesional. “Existen muchos desafíos comunes a los que nos enfrentamos como industria mundial de la papa, y debatir soluciones creativas implementadas en cada región puede ser invaluable en futuros congresos”, afirma.

Añade que una de las conclusiones más importantes del Congreso fue el creciente interés mundial por la sostenibilidad en la producción de papa. “Mejorar la sostenibilidad del cultivo de papa, en particular en lo que respecta a la reducción de insumos como fertilizantes y fitosanitarios, es un área que espero explorar más a fondo en mi trabajo”. En Uruguay, Colnago está desarrollando las siguientes etapas de la investigación en curso. El proyecto ya se ha expandido: seis agricultores cultivan su propia semilla de TPS, y la Red de Agroecología del Uruguay planea apoyar a nuevos agricultores en este proceso. La siguiente fase (2025-2028) consistirá en perfeccionar las técnicas de multiplicación de semillas, en particular mediante la producción de semilla de base y generaciones posteriores.

Además, se han establecido nuevas alianzas con organizaciones como el Comité Nacional de Desarrollo Rural y la Red de Semillas Nativas y Criollas del Uruguay.

Con estas nuevas alianzas y los resultados de su investigación, Colnago se muestra optimista sobre el futuro.

“Al desarrollar sistemas sostenibles y adaptados a las necesidades locales de multiplicación de semillas, podemos mejorar la resiliencia de los sistemas agrícolas familiares de papa y contribuir a la seguridad alimentaria en Uruguay en los próximos años”, afirma. “Uruguay está en camino de crear un sistema de producción de papa más sostenible y resiliente que apoye la seguridad alimentaria y la economía agrícola del país”.