Argentina: "Las dos papas"
Desde hace mas de 20 años, se empezó a trazar una línea delgada entra la conveniencia de producir papa para el mercado fresco o de pactar un contrato con las industrias procesadoras en sus distintas versiones.
La preferida de la industria
Y es así que desde la instalación de McCain Argentina en el Sudeste de Buenos Aires, más precisamente en la ciudad de Balcarce, aparecen nuevas variedades aptas para el procesamiento.
En los últimos años, la variedad Innovator es la preferida para la producción de papas prefritas congeladas. Las cualidades de esta variedad (nacida en los Países Bajos) se expresaron rápidamente, producto del clima y calidad de los suelos del Sudeste, que permitieron que se alcanzaran altos rendimientos (con registros de más de 70 tn/ha). Posee además tolerancia a algunas enfermedades y fundamentalmente bondades para freir y para almacenamiento.
Esta variedad tan noble, fue la elegida por otras industrias como Alimentos Modernos (Ex Farm Frites y ahora aliada a Lamb Weston) y Simplot (industrializando en Mendoza y concentrando la producción en el Sudeste de Buenos Aires). Si bien ambas empresas han diversificado con otras variedades como la "colorada" Asterix y las "blancas" Russet, Ranger, Umatilla, entre otras históricas, ya tienen incorporada a Innovator en su cartilla, que también es preferida por el productor.
Tradición en el mercado fresco
Por el lado del mercado fresco, el 95 % de la producción se concentra en la variedad Spunta, que desde su aparición en los´80 monopolizó el mercado y la pronta aceptación por parte de los consumidores como de los productores.
En todas sus versiones (sucia, lavada, procesada) ha sido difícil de reemplazar, ya que se adapta a todas las zonas de producción del país (Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Tucumán, Santa Fé, Catamarca, Jujuy, Salta, Río Negro, Neuquén, Entre Ríos, y algunas provincias más que se van sumando) y por otro lado, en las cocinas se destaca por su facilidad para "ser pelada", aunque sus cualidades culinarias no son las mejores.
Si bien tienen una mínima competencia en sus destinos, Innovator ya se comercializa en pequeños volúmenes en los mercados concentradores, en tanto que Spunta, al inicio de la cosecha (suele tener buena materia seca) sabe ser industrializada en bastones e inclusive se utiliza procesada para algunas "especialidades" para el mercado interno.
Pero la principal competencia se da en la producción, siendo el mayor interrogante que campaña tras campaña se le presenta a los productores paperos de las distintas regiones, y en especial del Sudeste de Buenos Aires, donde se concentra más del 80 % de la producción de papa para industria.
Cara o cruz?
Convendrá "hacer contrato" o me juego todo al mercado fresco? Obviamente que hay productores especializados en la producción de papa para industria, que "nacieron" a la par de la aparición de éstas, y que adoptaron toda la tecnología brindada por las fábricas, junto con cierta estabilidad en los precios. Estos productores se han sumado a la producción junto con la principal industria procesadora, quien paradójicamente es el "productor" más grande de papa del país.
Del otro lado se encuentran los productores que históricamente han sido fieles al mercado fresco, y que si bien han adoptado tecnologías similares a los "industriales" (cosechadora, transporte a granel, planta de acondicionamiento y procesado, almacenamiento, etc), la infraestructura montada, y la no dependencia con las fábricas, hacen que apuesten todo a esa modalidad de producción y comercialización, a pesar de los malos resultados obtenidos en los últimos años.
En el medio están los que diversifican, y que inclinan la balanza hacia un lado o hacia el otro, dependiendo lo que pasó la campaña anterior, la capacidad financiera, las perspectivas, etc.
A modo de ejemplo cabe mencionar lo sucedido en esta campaña, donde varios productores pequeños y medianos, que no hacían habitualmente "contrato" con las fábricas, optaron por incorporar variedades de industria, producto del fracaso del mercado fresco en las dos últimas campañas y de la posibilidad de financiar algún insumo estratégico como es la semilla, que es provista por las industrias en canje por producto a cosecha.
Otro aspecto que motivó la diversificación fue la inestabilidad política y económica del país, que llevó a que los productores optaran por pactar un contrato en dólares en la primavera pasada, cuando aún no se sabía que sucedería en las elecciones y menos que pasaría con "la divisa". Muchos otros aspectos son relevantes al momento de tomar la decisión, pero uno que define es el económico y es donde hace hincapié el productor para decidir la conveniencia por uno o por otro o equilibrar la balanza para no tener sorpresas.
Próximamente, sumaremos en Argenpapa una sección vinculada a la generación de información y datos de interés económicos que sean de utilidad para el productor, para la toma de este tipo de decisión y otras que habitualmente se le presentan, en un país con su economía continuamente convulsionada y que hacen más complicada la elección.
Mientras tanto, qué convendrá más en la próxima campaña, seguir apostando a la Spunta, o centrarse a mejorar la producción con un precio estable de la industria?
Por Sergio Costantino (Argenpapa)
Fuente: Argenpapa
