Durante la segunda semana de junio, las autoridades del Mercado de Río Cuarto detectaron el ingreso y la comercialización clandestina de una carga de papa en los barrios de la ciudad.
Cuando parecía que la curva de contagios se iba aplanando nuevos casos surgieron y esto repercutió en los protocolos sanitarios de cada mercado.
Desde el Comité de Crisis, mencionaron que este requerimiento, se solicita con el fin de poder establecer la trazabilidad de las personas que trabajan en el norte provincial.
Esta noticia permitirá a los productores cumplir con las normativas de manera sencilla y rápida.
La denuncia quedó desestimada por no constituir delito si bien en primera instancia se había iniciado por averiguaciones de ilícito. Quien tenía la mercadería en su poder, era como correspondía, un reconocido trabajador rural de Río Tala.
El Ministerio de Trabajo coordina con el sector primario un modelo de actuación para evitar la propagación del coronavirus.
La sospecha es que alguien que recibió donaciones de Mc Cain a través del Banco de Alimentos de Balcarce habría desviado un camión con papas que fue descargado en ese lavadero de Río Tala y preparado para su venta.
Repercusión diversa de la crisis en producciones sobre suelo bonaerense. Quejas por el impacto en compra de insumos de la medida del BCRA.
